Las dietas a base de alimentos “verdes”, “orgánicos”, o “libres de gluten” se han vuelto muy populares en los últimos años. Sin embargo, las tiendas están abarrotadas de productos cuyas etiquetas nutrimentales contienen todo tipo de términos confusos. Por ello nos hemos dado a la tarea de ayudarte a descifrarlos.

Orgánico

Los alimentos orgánicos se cultivan sin hacer uso de pesticidas sintéticos, genes modificados con bioingeniería (transgénicos), fertilizantes derivados del petróleo, o fertilizantes de aguas negras.

En el caso del ganado orgánico utilizado como productos cárnicos, huevos y lácteos, los animales pueden pastar y se les alimenta con alimento también orgánico. No se les administran antibióticos ni hormonas de crecimiento (de las que hablaremos más adelante).

En cuanto a sus beneficios, los alimentos orgánicos poseen más antioxidantes, y ya que básicamente no tienen contacto alguno con químicos de laboratorio, las personas con alergias a alimentos o a conservadores, suelen sentirse mejor cuando comen alimentos orgánicos. Recuerda buscar siempre buscar la etiqueta USDA Organic.

Natural

Esta es, en definitiva, el término más controversial, ya que no hay un acuerdo sobre a qué se refiere. Se asume que los “alimentos naturales” son los que han sido procesados o no contienen aditivos tales como hormonas, antibióticos, edulcorantes, colorantes o saborizantes. Sin embargo, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) no reconoce el término “natural”.

En los Estados Unidos, la USDA exige que cada producto alimenticio que se etiquete como “natural”, debe especificar a qué se refiere exactamente, tal como “sin colorantes añadidos”, “sin ingredientes artificiales”, o “mínimamente procesado”.

Non-GMO (No transgénico)

Los GMOs (“organismos genéticamente modificados), o comúnmente llamados “transgénicos” son aquellos que han sido modificados para hacerlos resistentes a los herbicidas y/o producir un insecticida. Los alimentos Non-GMO significa que NO son alimentos transgénicos.

Los GMOs se hallan en muchos cultivos (aquí encontrarás una lista completa), así que muy probablemente los consumes en el cereal de tu desayuno, y en cualquier alimento que contenga jarabe de maíz o lecitina de soya.

Se cree que los GMOs aumentan los problemas de los alérgenos alimentarios (alimentos que provocan reacciones alérgicas) y gástricos, así como el riesgo de cáncer, aunque nada se haya probado de manera concluyente.

Gluten-free (Sin gluten)

El gluten es una proteína presente en el trigo, espelta, centeno y cebada. Algunos granos están naturalmente libres de gluten, tales como el arroz integral, trigo sarraceno, quinoa, arroz salvaje, amaranto, sorgo, mijo, polenta y teff.

Las personas con desórdenes relacionados con el gluten, tales como celiaquía, sensibilidad al gluten no celiaca, ataxia por gluten y alergia al trigo, deben llevar una dieta libre de gluten.

Sin embargo, y aun si no se ha hecho suficiente investigación, las dietas libres de gluten se han vuelto muy populares porque se cree que ayudan a bajar de peso. Según la Cleveland Clinic, el mayor riesgo de estas dietas es que reemplazan muchos productos con gluten con alimentos altamente procesados sin gluten que no sólo no ayudan a perder peso, sino que incluso pueden aumentarlo ya que suelen tener más calorías que los que contienen gluten.

No-hormones added (Sin hormonas añadidas)

Esta etiqueta se encuentra en todo tipo de carnes, pero hay un par de cosas que debemos entender primero. Para empezar, todos los organismos contienen hormonas (incluyéndonos), así que no hay tal cosa como “sin hormonas” o “libre de hormonas”, ya que son totalmente naturales. Ahora bien, la etiqueta “sin hormonas añadidas” se refiere a productos cárnicos a los que no se les añadió hormonas durante su crianza.

Se añaden hormonas a los animales para que crezcan más rápidamente, y aún si la FDA afirma que no son dañinos, se cree que aumentan el riesgo de cáncer de pecho, próstata, y otros cánceres en humanos.

No antibiotics added (Sin antibióticos añadidos)

Como esta etiqueta se encuentra en carnes/aves, y también podrás encontrar “criado sin antibióticos” o “no se administraron antibióticos” siempre y cuando el criador proporcione la documentación que pruebe que el animal se crio sin antibióticos.

Los epidemiólogos han podido relacionar el uso excesivo de medicamentos en animales con infecciones halladas en humanos, incluyendo el Staphylococcus aureus resistente a la meticilina o SARM, en carne de pollo, puerco y res. Además, el abuso de los antibióticos en animales ha dado lugar a infecciones que las medicinas ya no pueden curar; del mismo modo, los humanos pueden infectarse cuando coman alimentos que se hayan contaminado con alguna bacteria.

Fair-trade (Comercio justo)

El Fair Trade o comercio justo es un modelo en el que los agricultores reciben un precio justo por sus cosechas. Aunque no lo creas, cuando compramos productos en una tienda, ésta se lleva la mayor parte del dinero, mientras los agricultores se llevan una mínima parte en comparación.

Ya que el fair trade fija precios mínimos (sin importar el mercado, los cultivos especificados no pueden venderse por menos de ese precio), los agricultores reciben pagos y salarios justos, trabajan en condiciones seguras, y se protege al medio ambiente, mejorando así sus comunidades.

Cage-free (libres)

Esta etiqueta se ha vuelto muy popular en las cajas de huevos y carne de pollo, y quiere decir que las gallinas y los pollos no estaban en jaulas. Pero eso no quiere decir que fueran realmente “libres” para andar de aquí para allá, ya que en su mayoría siguen permaneciendo en espacios muy reducidos (eso sí, sin jaulas) donde apenas si pueden moverse sin chocar uno con otro.

En cuanto a sus ventajas, no hay ninguna evidencia de que los huevos “de gallina libre”, o la carne de “pollo libre” sea más nutritiva.

Free Range (libre pastoreo)

Esta etiqueta quiere decir que los animales podían pasear libremente al menos la mitad de su vida; está regulada por la USDA e incluye carne, huevos y aves, pero no implica que también la gallina que ha puesto los huevos sea “de libre pastoreo”. Además, ten en cuenta que la USDA considera que 5 minutos son tiempo suficiente para que los animales paseen libres.

En cuanto a sus beneficios, las carnes de libre pastoreo contienen menos calorías y menos grasas. Por si fuera poco, tienen mayores niveles de vitaminas y un mejor equilibrio de ácidos grasos omega-3 y omega-6 que la carne y lácteos convencionales.

Ahora que conoces las diferencias entre tantas etiquetas, podrás tomar decisiones más sanas para alimentarte, que son buenas para tu salud y tu bolsillo. Recuerda que un estilo de vida sano es siempre tu decisión, #YaDecídete.